Miguel Bosé sigue imparable en el mundo de la música y no se achica. Tras formar parte como jurado en el concurso televisivo El número 1 llega a Zaragoza con nueva gira y nuevo trabajo, la continuación de Papito, que no se trata sino de Papitwo.
--¿Cómo se reinventa Miguel Bosé tras más de 30 años dedicándose a la música?
--La reinvención de Papitwo es la continuación de Papito, es decir, traer al hoy, a nivel de producción y a nivel sonido, las canciones que se pierden de 35 años para atrás en el tiempo. Se trata de plantearse de nuevo las canciones que han sido éxitos, y construirlas de tal manera que parezcan del hoy y sigan formando parte del ayer.
--Tras lanzar en 2007 Papito y alcanzar los tres millones de copias vendidas ha sacado en 2012 Papitwo, ¿y lo de segundas partes nunca fueron buenas?
1--Me cago solemnemente en el refranero. ¡Creo que es una tontería como la copa de un pino! Lleva tres semanas en el número uno en ventas. Es un álbum que fue totalmente requerido. Llegué al límite del chantaje a nivel del público. La gente me decía: "Nos debes otro, nos debes otro". ¿Donde está Linda? ¿O Duende?. Ahora me preguntan por la calle que dónde está Don diablo o Bravo muchachos o Super Superman. ¡Es que todavía faltan muchas!
--¿Cómo ha evolucionado entonces el Miguel Bosé que cantaba Linda al que canta Morenamia?
--Es una evolución natural. Quieras o no la vida te va cargando de un proceso de experiencias, de dejar cosas atrás e incorporar cosas nuevas que te va haciendo maduro, adulto y por supuesto más sólido. Uno no podrá ser el mismo que era con 20. Como valores y principios, todo esto ha sido inamovible, a lo largo de mi carrera y en mi persona. Pero hasta la música ha ido evolucionando conmigo a lo largo del tiempo. Ha cambiado la forma de componer, el tono con el que hacía las cosas con 18 años era distinto que 15 años más tarde. Miguel Bosé ha ido durante todos estos años creciendo y haciéndose. Y Bosé es obvio, lo veis y escucháis lo que ha evolucionado.
--Su última colaboración televisiva fue como jurado en el programa El número uno, ¿qué es lo mejor que le ha reportado la experiencia?
--Yo creo que lo más bonito es poder trasladar tu experiencia a la gente que está empezando en tu profesión. Y esa es con la parte que me quedo.
--Ahora llega a Zaragoza con un concierto en plenas Fiestas del Pilar, ¿cómo ve la cita con el público aragonés?
--El público maño se caracteriza por ser muy alegre, le gusta mucho festejar, le gusta mucho divertirse. Es un público que sabe vivir la vida pero hasta los extremos más sublimes. Es un pueblo con muy buen humor, con mucha energía y muy sanote. Estos conciertos la gente los vive con mucha alegría, pues vienen a festejar las canciones que han vivido en su pasado.
--¿Cómo se reinventa Miguel Bosé tras más de 30 años dedicándose a la música?
--La reinvención de Papitwo es la continuación de Papito, es decir, traer al hoy, a nivel de producción y a nivel sonido, las canciones que se pierden de 35 años para atrás en el tiempo. Se trata de plantearse de nuevo las canciones que han sido éxitos, y construirlas de tal manera que parezcan del hoy y sigan formando parte del ayer.
--Tras lanzar en 2007 Papito y alcanzar los tres millones de copias vendidas ha sacado en 2012 Papitwo, ¿y lo de segundas partes nunca fueron buenas?
1--Me cago solemnemente en el refranero. ¡Creo que es una tontería como la copa de un pino! Lleva tres semanas en el número uno en ventas. Es un álbum que fue totalmente requerido. Llegué al límite del chantaje a nivel del público. La gente me decía: "Nos debes otro, nos debes otro". ¿Donde está Linda? ¿O Duende?. Ahora me preguntan por la calle que dónde está Don diablo o Bravo muchachos o Super Superman. ¡Es que todavía faltan muchas!
--¿Cómo ha evolucionado entonces el Miguel Bosé que cantaba Linda al que canta Morenamia?
--Es una evolución natural. Quieras o no la vida te va cargando de un proceso de experiencias, de dejar cosas atrás e incorporar cosas nuevas que te va haciendo maduro, adulto y por supuesto más sólido. Uno no podrá ser el mismo que era con 20. Como valores y principios, todo esto ha sido inamovible, a lo largo de mi carrera y en mi persona. Pero hasta la música ha ido evolucionando conmigo a lo largo del tiempo. Ha cambiado la forma de componer, el tono con el que hacía las cosas con 18 años era distinto que 15 años más tarde. Miguel Bosé ha ido durante todos estos años creciendo y haciéndose. Y Bosé es obvio, lo veis y escucháis lo que ha evolucionado.
--Su última colaboración televisiva fue como jurado en el programa El número uno, ¿qué es lo mejor que le ha reportado la experiencia?
--Yo creo que lo más bonito es poder trasladar tu experiencia a la gente que está empezando en tu profesión. Y esa es con la parte que me quedo.
--Ahora llega a Zaragoza con un concierto en plenas Fiestas del Pilar, ¿cómo ve la cita con el público aragonés?
--El público maño se caracteriza por ser muy alegre, le gusta mucho festejar, le gusta mucho divertirse. Es un público que sabe vivir la vida pero hasta los extremos más sublimes. Es un pueblo con muy buen humor, con mucha energía y muy sanote. Estos conciertos la gente los vive con mucha alegría, pues vienen a festejar las canciones que han vivido en su pasado.
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